Sr. Director:

La Rusia Zarista parece renacer de sus cenizas, Vladimir Putin pese ha haber dejado esta semana el cargo de Presidente a manos de su pupilo Dimitri Medvédev, seguirá manejando los hilos como líder del partido Rusia Unida y como Primer Ministro del país.

De esta forma Putin parece anclarse en el poder, temeroso de que la oposición emprenda alguna tentativa revolucionaría como sucedió tiempo atrás en Georgia y Ucrania. Muchos analistas critican las medidas cada vez más autoritarias del nuevo zar de Rusia, la continua e incesante toma del poder de Rusia por parte de los ex colegas del KGB de San Petersburgo de Vladimir Putin.

La situación de Rusia dista mucho de la época de Yeltsin,  también hay que valorar el contexto económico actual el cual ver de forma mas sosegada quien es el verdadero artífice del nuevo auge de Rusia, este no es otro que los elevados precios del crudo.

Putin ha sabido utilizar a Gazprom como su embajador en la UE y en  otros países que le circundan, de esta forma y dada la dependencia de estos de las fuentes energéticas del Oso Ruso, ha hecho que  la luz de Rusia vuelve a resurgir de las sombras en las que se encontraba hace apenas una década.

El control y la forma de Gobierno de Putin es cuando menos peligrosa para la democracia, pero hay que reconocer el hecho de que con Putin los oligarcas parecen estar bajo control o al menos se  ve limitada su influencia siempre y cuando no se opongan al Kremlin.

Así pues luces y sombras es lo que caracteriza hasta la fecha el gobierno del nuevo Zar, esperemos que las críticas firmes de Occidente velen por el mantenimiento de la democracia en Rusia sin que están sean menguadas por la dependencia energética.

Jorge Ipiña Pando

kidon12@hotmail.com