Toda una revolución en el entorno Caixa, en su grupo industrial. El punto más importante es que Francisco Reynés, hasta ahora con Ricardo Fornesa en Criteria, se convierte en consejero-director general de Abertis, apenas días después de que Salvador Alemany, el hombre clave en la historia de Abertis, fuera elevado a la Presidencia. Con el tiempo, Reynés le sucederá en el primer puesto ejecutivo.
Otros dos directivos de Abertis han sido ascendidos, el financiero José Aljaro y Josep Martínez-Vila, para el que se ha creado la Dirección General de Negocios y Operaciones.
Los cambios en Abertis han sido decididos por Isidro Fainé, presidente de La Caixa, que ha informado de los mismos a Florentino Pérez, vicepresidente de la empresa de infraestructuras. Por cierto, las relaciones deben marchar viento en popa entre ACS y La Caixa, habida cuenta de la entidad financiera catalana costeará los avales, 57 millones de euros, con los que Pérez se presenta a la presidencia del Real Madrid.
El puesto de Reynés en Criteria, con categoría de consejero-director general -vamos a necesitar un diccionario de cargos- es ocupado, tal y como adelantó Hispanidad, por un joven de 43 años, proveniente de la oficina londinense de Morgan Stanley. Se trata de Gonzalo Gortázar, viejo conocido del hoy vicepresidente de Criteria, Juan María Nin, porque tuvo un papel importante en la salida a Bolsa de Criteria, trabajo por el que ahora Fainé le recompensa.
Y más cambios. No puede pasar inadvertido el nombramiento de Joan Rosell, presidente de la patronal catalana, como consejero de Gas Natural-Unión Fenosa. Aunque Rosell, quizás por aquello de ser un patrono, se identifica con el Partido Popular, lo cierto es que se mueve a las mil maravillas entre la guardia de corps empresarial de Rodríguez Zapatero, amigo personal de los dos grandes asesores empresariales de Rodríguez Zapatero (junto al hotelero Antonio Catalán) como son el presidente del Consejo Superior de Cámaras de Comercio, Javier Gómez Navarro y el consejero ejecutivo de Telefónica, Javier de Paz.
En resumen, revolución en La Caixa y apertura de la sociedad, en todo el entorno Caixa, a ejecutivos venidos de fuera en un grupo siempre tradicional, para que luego digan que no hay nada nuevo bajo el sol.
Eulogio López
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