- A Obama no le importa España sino que se rompa Europa.
- Para la economía norteamericana, nada mejor que el aliado europeo frente a los emergentes, especialmente China.
- No, no sería una buena noticia para Estados Unidos que España se marchara del euro.
- Y sobre todo, España se ha convertido en interés prioritario para la banca norteamericana más especulativa. Sobre todo en materia energética.
A 3 meses de las elecciones norteamericanas, Barack Obama ha llamado a Mariano Rajoy (en la imagen). La verdad es que le ha llamado en otras ocasiones, lo que pasa es que el inquilino de la Casa Blanca ha descubierto la diplomacia telefónica: 30 minutos al habla con Mariano Rajoy, con el correspondiente intérprete.
En esta ocasión convenía a los norteamericanos filtrar la conversación. Según el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, y según sus filtradores a la prensa norteamericana, Obama se preocupó por saber si la canciller alemana Angela Merkel había cedido. Una pregunta tonta porque sabe perfectamente que no lo ha hecho ni lo hará: Alemania continúa extorsionando a España. Ahora bien, quería asegurarse de que Rajoy no se iba a rebelar contra el imperialismo alemán y no se saldría del euro. Puede estar tranquilo, Rajoy es cobardón y prefiere ser esclavo de Alemania y seguir mortificando a los españoles, pues tiene miedo a volar solo.
A Estados Unidos le conviene una Europa unida que le ayude a hacer frente a los emergentes, especialmente a China, quien le disputa la primacía económica mundial.
Por otra parte, España es un objetivo prioritario de los bancos de inversión norteamericanos, así como de los fondos gringos más especulativos. El embajador norteamericano en España, Alan Solomont, no deja de interferir en la política española, por ejemplo, para que se mantengan las subvenciones públicas a la energía solar, financiada por bancos y fondos norteamericanos.
En definitiva, Obama quiere que España pida el rescate y se convierta en un satélite alemán, con lo que se salvaría la moneda única, sólo que a costa de los españoles. Y el cobardón Rajoy busca una fórmula de pedir la intervención sin que lo parezca.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com