Sr. Director:
Ante la celebración del 60 aniversario de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y de la visita del Papa, Benedicto XVI, ha pronunciado un gran discurso en la sede de dicha organización, en el que ha recordado los fundamentos fundacionales de la organización.
Ante algunas actuaciones y/o cosas promovidas o permitidas desde la organización, cabe preguntarse: ¿Puede el poder político decidir quién tiene derecho a la vida y quién no? ¿Es legítimo intentar imponer la propia voluntad al resto de la sociedad por medio del terror?
¿Es aceptable transformar la escuela en una máquina de propaganda estatal? Al menos en teoría, la respuesta a estas preguntas estaba clara hace 60 años. La experiencia de las guerras mundiales obligaba a reconocer que hay valores innegociables, cuyo origen está en la dignidad del hombre, anterior al Estado.
Desde estas premisas se redactó la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que, según acaba de decir el Papa, constituye el fundamento mismo de la ONU. ¿Puede permitir la ONU se prive a los no nacidos del derecho a la vida?
Jesús Martínez Madrid
jdmezmadrid@gmail.com