Al jefe de diseño, una de las bazas de la compañía, no le agrada el estilo prusiano del presidente Erich Schmitt
Es el jefe de diseño de Martorell. Con su equipo, la pieza clave del resurgir de la factoría. Belga, pero que ha vivido en medio mundo, Luc Donkerwalke está harto del espíritu prusiano del presidente de SEAT, el alemán Erich Schmitt, quien pretende controlarlo todo, lo importante y lo irrelevante, y amenaza con marcharse a la competencia que, dicho sea paso, le recibiría con los brazos abiertos. Por ejemplo, Opel.