Miguel Ángel Moratinos encabezará la representación española
Hispanidad ha informado de las notables ausencias anunciadas por el Gobierno. Ni Zapatero ni De la Vega quieren saber nada de las beatificaciones del 28 de octubre. Interpretan la ceremonia como una afrenta a la Ley de Memoria Histórica, como si el mundo en general y la Iglesia en particular anduviera pendientes de sus decisiones. Tampoco acudirá el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, de quien depende la Secretaría de Asuntos Religiosos.
A la beatificación de 498 mártires -todos ellos españoles- acudirá el ministro correspondiente, Miguel Ángel Moratinos, porque para el Gobierno estos asuntos son completa y sencillamente "exteriores". De ahí para abajo, porque el Ejecutivo Zapatero sólo envía al embajador ante la Santa Sede, Francisco Vázquez, y a la secretaria de asuntos religiosos, Mercedes Rico, y Luis Calvo, subsecretario de Asuntos Exteriores y Cooperación.
El PSOE está centrado en los actos de precampaña… y el PP también. De ahí que ningún presidente de comunidad autónoma haya hecho hueco en su agenda para estar presente en Roma. Han preferido enviar a sus vicepresidentes en el mejor de los casos o a alguno de sus consejeros. Ni eso en el caso de la Generalitat de Cataluña, que comunicó por error la asistencia de su presidente, José Montilla, pero que sólo enviará a su secretaria de Asuntos Religiosos, Montserrat Coll.
En cuanto a los grupos parlamentarios sólo acudirán senadores y diputados del PP y del PSOE.