Ya lo consiguió con la Ley de Parejas de Hecho, una de las primeras de España
El País abre su edición de este lunes con la ‘noticia' de que "los socialistas retan a Sanz para que permita el aborto en Navarra". Una noticia poco noticia, porque la actual presidenta del Parlamento navarro, Elena Torres, lleva años presionando al Gobierno foral desde el grupo socialista para que se permita el aborto en Navarra. Paradojas del destino, la Sra. Torres está ahora embarazada de gemelas.
La cosa la han vestido como el ‘derecho' de las mujeres al aborto. Un término que ya apareció en el documento del PSOE "Laicismo y Educación para la Ciudadanía" de diciembre de 2006. En realidad, como es sabido, desde el punto de vista jurídico, el aborto no es un ‘derecho', sino un acto penal cuya pena queda en suspenso en tres determinados supuestos. Así que el hecho de que en Navarra no se practiquen abortos no significa que se niegue ningún derecho.
Por lo demás, la comunidad foral lleva años subvencionando a las mujeres que quieren abortar para que lo hagan en Zaragoza o –principalmente- en San Sebastián. Además, los gobiernos de Sanz nunca han presumido de que en Navarra no se hagan abortos. Más bien al contrario. Se trataba de algo cuasi vergonzante, que se guardaba y gestionaba en silencio. "Un tema tan tabú como el dinero con el que el Gobierno foral subvenciona los abortos de las navarras", señalan a Hispanidad fuentes de Provida Navarra.
Lo que hay detrás no es un debate social, sino político. El PSN se ha quedado con la brocha en la mano tras el ‘gobierno interruptus' y el golpe en la mesa de Blanco. Los que apostaban por el acuerdo con NaBai (no sólo Puras sino Chacón y Caldera) necesitan demostrar las distancias con UPN. Los complejos de UPN harán el resto. Sería algo así como "gobernamos nosotros, pero con el busto de Sanz".
Pero hay más. Si el PSN logra el acuerdo con IU y NaBai con este tema es bastante probable que se sume CDN, dejando en minoría a UPN. En todo caso, aunque no lo hiciera, tendría mayoría suficiente para sacar adelante lo que sea. Y eso ya es una foto adelantada de una posible moción de censura. Una evidencia de que Sanz no podrá gobernar con la espada de Damocles del PSN. Por lo demás, el aborto no era clave del PSN, sino de IU que en las negociaciones puso el aborto como condición sine qua non para entrar en el Gobierno. Por su parte, el socialista Roberto Jiménez sugirió en el acto de investidura la necesidad de que "se respetaran los derechos reproductivos de las navarras".
Pero si además consiguen que se sume el CDN, partirían al Gobierno en dos. Y no sería la primera vez. Hay precedentes. El CDN se sumó al pacto progre para aprobar la Ley de Parejas de Hecho. Como recordarán, Navarra fue una de las primeras comunidades en aprobar una ley de este estilo. Amparado en el mal menor, el líder de CDN, Juan Cruz Allí, argumentó que habían aprobado la adopción por parejas homosexuales porque estaban en el último lugar de la lista. Quien quiere justificarse siempre encuentra buenos motivos.