Sr. Director:

Somos, como Vd. bien sabe, más de 500.000 damnificados por las estafas de bienes tangibles.

Sólo deseo pedirle su mejor predisposición y agrado para nuestra lucha por recuperar todo o parte de nuestra inversión.  Muchos perdieron cuanto tenían en el momento que más se precisa en la vida; en su vejez. La única fuerza que tenemos es nuestro voto y considero bastante humano ayudar a quienes nos ayuden.

Esta comunicación  no ha sido dirigida a ningún otro medio ni digital ni impreso.

Rafael Blanco

rblanco@gmx.net