Acción a raudales pero nada más plantea este filme policiaco francés.
Simon es un ex policía cuya vida profesional, y familiar, se truncó cuando provocó un grave accidente de tráfico. A pesar de todo, en sus momentos más bajos, Simon cuenta con el apoyo de su amigo Franck, un valiente agente que no se arredra ante nada... Tanto es así que cuando la exmujer e hijo de Simon se encuentran en peligro, tras ser el niño testigo de un asesinato, ambos lucharán para salvarles la vida…
Todo un especialista es películas de acción, Fred Cavayé (Cuenta Atrás, Cruzando el límite) dirige este trepidante y bien rodado thriller de argumento tan sencillo como poco original que nos recuerda a películas tan populares como Único Testigo y El cliente. Tiene a su favor que hace una clara declaración a favor de la unidad familiar y de los lazos de amistad y en su contra que hace alarde de una exagerada violencia.
Vincent Lindon y Gilles Lellouche demuestran su buena forma física en una película donde las persecuciones son la nota predominante.
Para: Los que les gusten las películas de acción aunque carezcan de argumento original