Sr. Director:
El Ministerio de Sanidad del Gobierno italiano en funciones ha hecho público un informe sobre la situación del aborto en el país.

Junto a una disminución del número de casos (en torno al 3%), el dato más llamativo es el crecimiento del número de objetores entre los médicos y demás personal sanitario (anestesistas, enfermeras, etc.).

Según el informe italiano, en 2007 los ginecólogos objetores en Italia fueron ya el 70% del total: un porcentaje muy superior al 58,3% de 2003. Algunas regiones, como el Véneto (79%) y Sicilia (84,3%), tienen porcentajes muy por encima de la media nacional.

Tal vez convenga recordar que en Italia, la ley permite el aborto dentro de los primeros noventa días cuando llevar a término el embarazo comportaría un grave peligro para la salud física o psíquica de la madre, o bien por sus condiciones económicas, sociales o familiares, por las circunstancias en las cuales ha tenido lugar la concepción, o por la previsión de anomalías en el concebido. Después de los noventa días solo se permite cuando corre peligro la vida de la madre, o su salud psíquica o física, a raíz de las malformaciones del no nacido. El artículo 9 de la ley del aborto reconoce el derecho a la objeción de conciencia de los médicos y de sus ayudantes a estas prácticas.

Creo muy significativa la noticia, primero sobre el derecho a la objeción de conciencia del personal sanitario y en segundo lugar, lo más positivo, que cada año lo ejerzan más.

Jesús Martínez Madrid

jdmezmadrid@gmail.com