Sr. Director:
Desde hace algunos meses, las aplicaciones socioeconómicas que se está llevando a cabo un gobierno socialista  en el país vecino por el norte contradicen las tesis de los socialistas españoles, no está de más pedir a los nuestros que se aclaren.

Y es que el primer ministro francés, Manuel Valls, ha decidido desprenderse del lastre que suponían algunos ministros de su Gabinete, como el titular de Economía, Arnaud Montebourg, para el éxito de un programa de reformas absolutamente necesario para sacar a Francia de la aguda crisis en la que se halla inmersa.

Se trata de políticos del ala izquierda del Partido Socialista francés, anclados en los mismos postulados ideológicos populistas que se han demostrado nocivos para la estabilidad social y el progreso económico. Pienso que es la hora de que vayamos aprendiendo, a pesar de que se pueden perder votos de sectores radicales.

X. M.