Fue Zapatero quien habló de la Comisión Zurbano como de tridente. Así que Moragas (PP) acusa a España de participar en el tridente con Cuba y Venezuela. Moragas insiste en reclamar el mantenimiento de la posición común europea, la apertura de la embajada a la disidencia en la Fiesta Nacional y la exigencia de que la Cruz Roja Internacional pueda visitar las cárceles cubanas.
La respuesta de Moratinos es la esperada. Insiste en que la presencia de la disidencia en la embajada el día de Fiesta Nacional es diplomacia de canapé y que es más eficaz mantener abiertas las embajadas todos los días, como lo hacemos. Además, reitera su doctrina: es mejor superar la posición común porque no da resultados. Nuestro canciller apuesta más bien por una relación bilateral que comprometa al régimen de los hermanos Castro. Y afirma que esa política de distensión es la que ha permitido que funcionarios españoles hayan podido visitar cárceles cubanas. ¿Cuál es el resultado de esa visita? Moratinos nunca ha informado.
Incluso Moratinos se jacta de que la política de distensión ha permitido liberar a 17 de los 75 detenidos en la primavera negra de 2003. Algunos han venido a España y les permitimos que critiquen a este Gobierno, señala. Murmullo en el hemiciclo. Faltaría más que los disidentes no pudieran criticar al Gobierno de España. Les acogió en contra de su voluntad, porque ellos preferían permanecer en Cuba, su patria. Ahora han sido abandonados por las autoridades españolas.