Ya informamos el jueves 23, pero hoy viernes 24 lo ha confirmado el vicepresidente del Gobierno, Pedro Solbes. Los Presupuestos Generales del Estado (PGE) aprobados en el Consejo de Ministros contemplan la deflación de la tarifa, en contra de la no actualización que había sido práctica habitual del anterior Gobierno. No obstante, quedan sin actualizar las deducciones por vivienda. O sea, que se tratará de una deflatación parcial.
En cualquier caso, suficiente para que el Ejecutivo toque el tambor y responsabilice al anterior Gobierno de no haber realizado esta práctica, que sube los impuestos de 15 millones de contribuyentes en términos reales. Pero vayamos a las cifras. Resulta que el ahorro para los sufridos contribuyentes será de 175 millones. Una cifra que al ciudadano medio le hecha para atrás, pero que no es más que el chocolate del loro en términos presupuestarios.
Tan chocolate del loro que cuando Solbes responde a la pregunta de cuánto supondrá la actualización de los impuestos de alcoholes y tabacos responde diciendo que será una cantidad "insignificante": unos 400 millones de euros. Si Gobbels resucitara, haría un master.
