Wall Street Journal ofrece este martes una visión distinta de la Junta General Extraordinaria del Santander. El diario estadounidense señala las críticas de los accionistas a las que tuvo que enfrentarse el presidente del Santander, Emilio Botín. Por ejemplo la de Ignacio Quirós, que se refirió a Botín como un absoluto incompetente por haber convencido a la gente para que entregara los ahorros de su vida a Madoff. Aunque los portavoces del banco no escucharon el comentario, Botín cortó a Quirós y pidió su expulsión: Echen a ese tío de aquí.
Otro accionista, Antonio Panea, pidió la dimisión del consejero delegado, Alfredo Sáenz por la compra de Sovereign, a la que se refirió como un grave error. Panea considera que comprar un banco en Estados Unidos es una de las acciones más arriesgadas que puede emprender un banco en estos tiempos. En su opinión, el CEO de Santander y máximo responsable de Banif es el cerebro gris de todas las operaciones erróneas del banco en los últimos años.