Escocia seguirá formando parte del Reino Unido de la Gran Bretaña porque un 55% de los votantes han dicho que quieren seguir con Londres frente a un 45% de independentistas.

¿Ha acabado todo Ni mucho menos. El nacionalismo no tiene sentido porque, habrá que repetirlo, no se preocupa del Estado de Derecho sino del tamaño del Estado. Y ahí puede haber pacto pero no acuerdo.

Encima, el éxito de David Cameron (en la imagen) no es tal. Si un 45% pretende una medida tan radical como la independencia, ¿cuánto tardarán en solicitar un nuevo referéndum Además, diez 'noes' no zanjan la cuestión pero  un solo 'sí' es definitivo.

El nacionalismo no tiene solución pero la globalización es muy peligrosa

Probablemente, Escocia no consiga la independencia en los próximos años pero, al igual que en Cataluña, ya se ha sembrado el germen guerracivilista. Ni me gusta el nacionalismo ni me gusta su proceso opuesto: la globalización. Pero nada de ello es bueno, no para la estabilidad -un concepto que me agrada poco, porque los cementerios son muy estables- sino para la paz. La paz interna entre vecinos, que es la más importante.

Especialmente en la Unión Europea, un proyecto globalizador, probablemente el más importante del mundo, pergeñado bajo parámetros cada día más cristófobos.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com