El nuevo sistema perjudica a usuarios que invirtieron para beneficiarse de la tarifa nocturna

La desaparición de la tarifa nocturna supondrá incrementos de entre un 25 y un 80% en el recibo de la luz de un millón de familias, según el portavoz de la Unión de Consumidores de España, Dacio Alonso, que califica esta medida de inconstitucional. Esos incrementos, explica Alonso, permitirán a las eléctricas embolsarse de forma ilícita cerca de 150 millones de euros. Por ello, la UCE ya ha denunciado el texto ante el Defensor de Pueblo y ante instituciones similares de carácter autonómico y confían en la paralización del decreto.

Otras organizaciones de consumidores, como FACUA (Federación de Consumidores en Acción) recuerdan también que la CNE no ha dejado de recibir las quejas de los consumidores y que el propio regulador manifestó sus reservas acerca de la posible falta de seguridad jurídica que supone el cambio de tarifa.

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) solicita el mantenimiento de la tarifa nocturna, ya que el nuevo sistema de horas valle no supone una alternativa valida para aquellos que tienen contratada en la actualidad la tarifa nocturna, para hacer uso de sus acumuladores eléctricos. A juicio de la OCU, estos cambios hacen que la mayoría de las inversiones que han hecho estas familias para poder acceder a la tarifa nocturna, mediante la instalación de sistemas de acumulación, vean seriamente cuestionada su rentabilidad. Y suman a ello las campañas realizadas desde la Administración para que los usuarios se adhirieran a esta tarifa.