Este viernes el Consejo de Ministros ha aprobado un paquete de medidas laborales. Relevantes, en opinión de De la Vega. Poco significativas según se desprende de las palabras de la secretaria general de Empleo, Maravillas Rojo, que había señalado que en ningún caso se tomarían medidas laborales significativas si no era con el consenso de los agentes sociales.
Las aprobadas este viernes cuentan con la valoración de los sindicatos, dice De la Vega. Pero no su bendición. De hecho, los sindicatos, y también la patronal se han quejado. No eran sus propuestas. No ha partido del diálogo social como se había comprometido el Gobierno. ¿Se da por roto este compromiso de Zapatero de no tomar ninguna decisión en el ámbito laboral si no es con el consenso de los agentes sociales? De la Vega responde a Hispanidad que no, pero en rueda de prensa advierte que se pueden ir tomando nuevas medidas con el objetivo de proteger e incentivar el empleo y mejorar la protección.
¿Entonces? Deja claro que no se tomará nunca una medida sin consenso que desproteja a los trabajadores. Pero los sindicatos consideran que la posibilidad de que el nuevo empleador capitalice el paro del trabajador no es una medida protectora de los derechos del trabajador. ¿Incoherencia? Tal parece. Los sindicatos tienen la palabra. Y la emplearán contra Esperanza Aguirre. Cuestión de subvenciones.