El Gobierno ha aprobado este viernes el anteproyecto de reforma del Código Penal en que se endurecen los delitos de terrorismo y pederastia. Las líneas maestras han sido consensuadas con el PP, pero no la letra pequeña, según reconocen a Hispanidad fuentes cercanas al ministro Bermejo.
El nuevo Código Penal rompe la tradición y establece la posibilidad de que las personas jurídicas también delinquen. Una figura que será utilizada para asociaciones delictivas, pero no para los partidos polítidos regidas por la ley de Partidos. Además, se tipifica la asociación delicitiva de carácter temporal. Y lo más importante: se establece la no prescripción de los delitos de terrorismo cuando se trate de asesinato, secuestro o mutilación. En cuanto a la prescripción se detalla que se entenderá prescrito una vez que se produce una resolución judicial, aunque el tiempo de prescripción queda interrumpido una vez que se presenta una demanda o una querella. Y una última cosa: en todo caso no se aplicará la retroactividad porque así lo señala nuestra Constitución. Es bueno porque somos un estado de Derecho.
Más. No se rebajan las penas para ningún delito. Tampoco la investigación embrionaria. Aunque eso sí, todo queda al albur del debate parlamentario. ¿Seguridad de que todo vaya a pasar el filtro del Constitucional? Total. ¿Seguridad de que responde al consenso con el PP? Veremos.