Rajoy castiga a su pueblo e inclina la cerviz frente al imperialismo germano.
Esta es la historia y el problema de España, el único problema: se llama cainismo. Ya nos pueden estar flagelando desde Europa, que la culpa la tiene Madrid, o Cataluña, o Andalucía, dependiendo de quién esté en el uso de la palabra. Lo concreto todo en un breve correo electrónico que recibí de un lector de Hispanidad tras publicar el artículo "Hay que marcharse del euro, hay que acabar con el IV Reich, con Aleuropa". Dice así el Emilio de nuestro comunicante: "Vd. quiere que nos presten dinero para que nuestros politicos, C.G.J., etc. etc. y muchos mas etceteras... sigan despilfarrándolo? Enhorabuena por la idea, viva la fiesta".
¿Lo cogen? Justo cuando Alemania humilla a España al mejor estilo nazi-capitalista, cuando alimenta la extorsión de los mercados y convierte a las instituciones europeas –por ejemplo al BCE- en marionetas de sí misma. Cuando el Gobierno Merkel pretende convertir a España en un protectorado, y cuando los españoles se ven obligados a sacrificios constantes mientras los mercados se comen en días lo ahorrado en meses, cuando Rajoy, nuevamente, se rinde ante Berlín que nos exige un ajuste de 102.000 millones de euros en dos años… la culpa la tienen los políticos españoles que lo despilfarran todo.
¿Quiere usted que los alemanes nos presten dinero para que los políticos españoles se lo gasten? Mire, buen hombre, el prestamista no le hace un favor al prestatario, es justo al revés. Cuando usted paga el crédito a un banco es el banco quien hace negocio con los intereses que usted le suministra, no al contrario.
Y cuando los especuladores, es decir, los mercados financieros, nos exigen pagar a los españoles un 7% y a los alemanes un 1%, los prusianos no nos están haciendo un favor: se están forrando a nuestra costa. Y por cierto, por pura casualidad, los tenedores de deuda española más importantes son bancos y fondos alemanes. Miren por dónde.
Y por la misma razón, Merkel se niega a implantar la Tasa Tobin. Claro, porque le costaría más especular y extorsionar a los países mediterráneos.
Me dice un colega periodista especializado en economía: "No te extrañes, la gente no tiene por que entender los mercados financieros". De acuerdo. Ahora bien, el público alemán entiende tan poco de mercados financieros como el español o el de Pernambuco. La diferencia estriba en que, mientras el alemán se queja de todos los mediterráneos que tan caros nos salen, el español, en lugar de arremeter contra los teutones… lo hace contra sí mismo. Cainismo, guerra civil permanente y, si me lo permiten, estupidez colectiva.
Volvamos ahora al Gobierno Rajoy: Alemania nos humilla ordenando a su marioneta Mario Draghi que no compre deuda española pues el que más poder tiene en el BCE es el Bundesbank. Ya saben, lo importante no es adoptar medidas justas sino quién es el que manda. Entonces, Rajoy, en lugar de amenazar –y ejecutar- con la salida de España del euro, acepta un nuevo recorte todavía más salvaje: otros 100.000 millones de euros en dos años. ¿Por qué? Porque lo dice Merkel, naturalmente.
Y así, con un líder español como Mariano Rajoy, cainita –porque se ensaña con los españoles- cobarde –porque no se atreve a romper con una eurozona que ha convertido el sueño europeo en un banco de vampiros germanos- y con un pueblo empeñado en vivir en permanente guerra civil, no cabe duda de quién va a ganar esta batalla. No es que vayamos hacia el IV Reich, es que estamos en el IV Reich que, eso sí, no ejerce violencia militar -por el momento-, sólo violencia económica; no produce muerte -por el momento-, sólo pobreza.
Esta es la España tonticainita, que tiene por presidente a un estafermo, incapaz de enfrentarse a la voracidad alemana de Merkel, la política que, no lo duden, se está cargando los Estados Unidos de Europa, pues de eso se trataba.








