Asciende a 960 millones de euros, el 91% del PIBEl Banco de España ha informado este martes de que a finales de junio de 2012, el saldo deudor que España mantenía frente al exterior ascendió a 960 millones de euros, el 91 % del PIB, alrededor de 1 punto porcentual por debajo de su valor al cierre de 2011. Desde finales de 2011, el valor de los activos aumentó su peso en el PIB cerca de 6 puntos porcentuales, hasta el 136%, mientras que el de los pasivos se incrementó casi 5 puntos porcentuales, hasta el 227 % del PIB. La deuda externa —que recoge la parte de estos pasivos que es exigible— aumentó 4 puntos porcentuales, hasta, aproximadamente, el 170% del PIB.
"El recrudecimiento de las tensiones en los mercados financieros relacionadas con la crisis de deuda soberana en la zona del euro se manifestó en cuantiosas salidas netas de fondos de la economía española durante la primera mitad de 2012. En este período, los tipos de interés a largo plazo de la deuda pública española y el diferencial frente a la deuda soberana alemana aumentaron sensiblemente en comparación con los niveles alcanzados a finales de 2011, y la bolsa española acumuló pérdidas significativas que contrastan con las ganancias o estabilidad de las principales plazas bursátiles.
Por otro lado, el tipo de cambio del euro se depreció frente a la libra y al dólar. En este entorno de inestabilidad y de mayor aversión al riesgo, las condiciones de financiación continuaron siendo muy restrictivas", apunta la institución que dirige Luis María Linde.
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com
"El recrudecimiento de las tensiones en los mercados financieros relacionadas con la crisis de deuda soberana en la zona del euro se manifestó en cuantiosas salidas netas de fondos de la economía española durante la primera mitad de 2012. En este período, los tipos de interés a largo plazo de la deuda pública española y el diferencial frente a la deuda soberana alemana aumentaron sensiblemente en comparación con los niveles alcanzados a finales de 2011, y la bolsa española acumuló pérdidas significativas que contrastan con las ganancias o estabilidad de las principales plazas bursátiles.
Por otro lado, el tipo de cambio del euro se depreció frente a la libra y al dólar. En este entorno de inestabilidad y de mayor aversión al riesgo, las condiciones de financiación continuaron siendo muy restrictivas", apunta la institución que dirige Luis María Linde.
José Ángel Gutiérrez
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