Se trata de reducir plantilla: en la mayoría de los casos, el asalariado no soporta la presión y llega a un acuerdo para marcharse. Del 31 de marzo de 2008 a 31 de marzo de 2009, el Grupo cerró 336 oficinas y rebajó la plantilla en 7.306 empleados (un 7% del total). Al tiempo, OP Plus, la empresa de externalización del banco, pasa, en doce meses, de 650 a 900 trabajadores. BBVA sustituye las prejubilaciones -muy caras- por bajas incentivadas.
Sumergida ya en plena crisis, la banca busca la reducción de costes por doquier. Sobre todo por lo que respecta al personal. En BBVA están recurriendo a los tradicionales medios para recortar gastos de plantilla, con algunas innovaciones. Entre el 31 de marzo de 2008 y el 31 de marzo de 2009, el banco de FG cerró 336 oficinas. El cierre masivo ha levantado a los sindicatos, que han organizado concentraciones como la del pasado 12 de mayo para pedir al banco que cumpla con el protocolo de garantía del empleo, que tiene vigencia hasta el 31 de diciembre de 2010. UGT reclama un acuerdo que regule la forma en que se deben llevar a cabo los cierres para evitar el abuso.
En el mismo período, BBVA redujo el número de empleados en 7.306 por la vía de la no renovación de contratos temporales y en prácticas o la suspensión de contratos (garantizando su retorno en tres años). Desde que acabara 2008 se recurre menos a las prejubilaciones por su coste y más a las bajas incentivadas. BBVA está ofreciendo también la posibilidad de recortar jornada y salario.
Pero la técnica más novedosa es la de los expedientes disciplinarios. El responsable de UGT-BBVA señaló este viernes a Hispanidad que el número de expedientes disciplinarios iniciados se ha multiplicado por dos entre 2008 y 2009. Este diario ha podido saber que hablamos de algunos centenares, por lo que el uso de este método para recortar empleos parece evidente, más aún cuando UGT-BBVA indica que la mayoría de ellos no llega a juicio, sino que se queda en una baja voluntaria.
En cuanto a la externalización, la entidad presidida por Francisco González continúa con el Proyecto Clima para centralizar la banca comercial, lo que implica menor personal administrativo. Lógicamente, con menos personal para el mismo o mayor trabajo, el cliente acaba notando el deterioro en la calidad del servicio. Igualmente, sigue en marcha el Proyecto Velázquez. Con tan pintoresco nombre, el plan consiste en contar en Málaga con una filial de BBVA fuera del convenio de banca y cuyos trabajadores realizan las mismas tareas por la mitad del salario. En junio de 2008 contaba con 650 empleados y a estas alturas de 2009 se encuentra en torno a los 900. Así, los trabajadores de BBVA observan con preocupación la forma en que se va precarizando el trabajo, a pesar de que, comparado con su competidor, es el que presenta el semblante más risueño.