Incluso a un comandante de Iberia en un vuelo Munich-Madrid
La asociación de Líneas Aéreas ha pedido a los controladores de AENA y a los pilotos de Iberia que sean un poco más responsables, pues su no reconocida huelga de celo -pilotos- o enfermedades múltiples -controladores- no sólo está perjudicando el servicio y la imagen de Iberia o de AENA, sino a todo el Aeropuerto de Barajas y las aerolíneas que en ella operan.
De este modo, ALA no sólo se enfrenta a los pilotos de Iberia, sino a AENA y a su propietario, el Ministerio de Fomento, quien ha optado por decir que aquí no pasa nada. La propia ministra Magdalena Álvarez se ha aferrado al cinismo de asegurar que en Barajas todo funciona perfectamente, a pesar de los continuos retrasos y anulaciones de vuelos.
Por otra parte, los pasajeros están a punto de estallar. Hispanidad ha podido saber que en el vuelo de las 7,50 Munich-Madrid, del pasado día 22, tras soportar un retraso de dos horas y anunciar el comandante una nueva demora, estuvo a punto de provocarse un motín. El pasaje retó al piloto a salir y no dejó de insultarle durante un lapso de mucha tensión, mientras le alentaba a salir de la cabina.