Es el primer accionista individual de la Compañía, pero se enfrenta a un reto difícil
Se miraron pero se evitaron. El presidente de Unión Fenosa, Pedro López Jiménez, antaño miembro de la Junta Directiva del Real Madrid, con Florentino Pérez, y Julián Martínez Simancas, jefe jurídico de Iberdrola, coincidieron en el Palco Presidencial del Real Madrid, en su encuentro del pasado domingo contra el Athletic de Bilbao. Y es que Madrid es muy pequeño, y el Santiago Bernabéu tampoco es grande.
Y no sólo el sector ingeniería está que arde. Lo de Fenosa-Iberdrola viene exigido por el guión de la reconversión eléctrica, pero lo de López Jiménez y el presidente de Indra, Javier Monzón, es algo que no tiene mucha explicación. Monzón, especialista en convivir con poderosos no está acostumbrado a López Jiménez que es empleado, pero también socio, de Florentino Pérez. Monzón ha acudido a éste último para que le libre del acoso -hay que reconocer que el amigo Monzón no está acostumbrado a sufrir acosos- de Jiménez. Éste en cuanto dueño de la antigua Soluziona y primer accionista de Indra, exige y exige bien.
Total, que Florentino ha acudido a un hombre bueno. Que imparta la paz entre ambos: el veterano Fernández Tapias, quien a pesar de sus achaques sigue al pie del cañón. Como primer accionista individual de la compañía, ha sido nominado por Pérez para poner paz entre López Jiménez y Monzón.
¿Y Caja Madrid? Caja Madrid es un socio muy cómodo: no pinta nada.
