• Anima a colgar en las redes sociales las fotos de los piquetes: "Se tiene que demostrar dónde está cada cual".
  • "Los piquetes son un vestigio del siglo pasado".
  • CCOO afirma que la presidenta madrileña está incitando al "conflicto en las calles".
  • Afirman que la formación de contrapiquetes es muy peligrosa.

No hay otra como ella. Ni Manuela Malasaña se defendió con tanto brío contra los franceses. La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre (en la imagen, en su foto de Twitter), ha animado a los ciudadanos a colgar en las redes sociales fotografías y vídeos si son víctimas de cualquier acto de violencia o coacción por parte de los piquetes. Ella ha predicado con el ejemplo y ha utilizado su cuenta de Twitter para llamar a "todos los ciudadanos a ir a trabajar mañana" y a denunciar a la policía nacional los incidentes de los que puedan ser víctimas los trabajadores en su derecho de ir a trabajar este jueves, día de la huelga general. En su perfil de Twitter se dirige de esta forma tan castiza a IU: "No me cuente historias. Tan legítimo es el que quiere ir a la huelga como el que quiere ir a trabajar".

Aguirre ha apelado a la guerra virtual no sólo en su cuenta de la red social, sino en persona, y lo ha hecho tras la reunión del Comité de Dirección del PP en Madrid. Esperanza Aguirre ha hablado en plata sobre el paro convocado para el jueves:

"El PP de Madrid hace un llamamiento a todos los ciudadanos para ir a trabajar y considera que esta huelga no tiene ningún sentido y mucho menos en este momento", ha dicho Aguirre quien ha señalado que lo único que persigue esta huelga es arruinar España.

Ha indicado que "estamos en un momento en que las tecnologías nos permiten la transparencia en tiempo real y eso es lo que tiene que demostrar dónde está cada cual…". Aguirre ha pedido a la ciudadanía de Madrid literalmente que "cumpla con su deber cívico de denunciar cualquier acto de violencia contra las personas o las cosas que vean y que cuelguen fotografías y vídeos en las redes sociales". También ha definido a los piquetes como un vestigio del siglo pasado.

En su comparecencia ha aprovechado para recordar los teléfonos que ha puesto a disposición la policía nacional para que se denuncien los hechos violentos y coacciones: el 91-322-36-96, además del 091.

La Presidenta de la Comunidad de Madrid ha negado la necesidad de piquetes informativos: "en la era de las telecomunicaciones, pensar que es necesario que a las seis de la mañana vayan unos señores a explicar a gritos a las cocheras de Metro o de la EMT que hay una huelga es una tomadura de pelo; lo que pasa es que no van a explicar nada, van a coaccionar a los trabajadores que quieran ir a trabajar, y eso en un Estado de derecho no es tolerable".

Aguirre ha calificado de "totalmente increíble que los sindicatos, que han estado tres años viendo cómo se perdían 3.000 puestos de trabajo al día sin decir nada ahora convoquen una huelga contra las medidas de un Gobierno que no ha cumplido ni cien días y que ni han entrado en vigor… Nunca en la democracia española se ha convocado una huelga general con menos motivos y con una intencionalidad política más clara que ésta". También ha señalado que "hasta los propios sindicalistas saben que la huelga no va a servir para nada…".

Los sindicatos CCOO y UGT de Madrid no han permanecido callados ante la embestida, y consideran que la presidenta pretende convertir la huelga en un problema de orden público al aleccionar a los ciudadanos a que cuelguen en las redes sociales fotos y vídeos de actos violentos. Francisco Cruz, secretario de Organización de CCOO ha considerado, que la petición de Aguirre es "una auténtica barbaridad" que sólo persigue "incitar a que haya un conflicto" en la jornada de huelga general, porque la formación de contrapiquetes es peligrosa. "Se está fraguando un planteamiento para infiltrar a gente entre los piquetes para soliviantarlos", ha declarado.

UGT de Madrid ha emitido un comunicado en el que tilda de "despropósito" las medidas propuestas por Aguirre y manifiesta que hay que recordar que el derecho fundamental que hay que proteger es el de huelga.

Sara Olivo

sara@hispanidad.com