Sr. Director:
Somos millones los católicos españoles que nos hemos alegrado con la beatificación de cerca de quinientos compatriotas nuestros. Lamentablemente también ha habido críticas do las mismas procedentes de sectores laicistas afines al Gobierno y de católicos progresistas.
Se ha dicho que dificultan la reconciliación entre los dos bandos de la guerra civil, pero curiosamente quienes tal cosa afirman no opinan lo mismo respecto a la Ley de la Memoria Histórica. Precisamente otros aluden a esta ley, asegurando que las beatificaciones son la respuesta de la Iglesia española a la misma; ignoran que los procesos que han conducido a la ceremonia del domingo en San Pedro, se iniciaron muchos años antes de que accediera al poder el Gobierno actual. Finalmente, otros echan en cara a los obispos que no se haya beatificado también a los curas ejecutados por el bando franquista.
No se tiene en cuenta que no se haya beatificado a todos los miles de sacerdotes, obispos y religiosos asesinados durante la guerra, sino sólo a 498, de los cuales se ha demostrado mediante los 23 procesos de beatificación incoados, que murieron como consecuencia de su fe y dando testimonio de la misma. Si alguna institución hubiera promovido la beatificación de los sacerdotes asesinados por el otro bando, y el proceso hubiera demostrado que murieron de forma idéntica a los otros, no me cabe duda que también hoy serían considerados oficialmente como mártires de la fe.
Y si realmente lo son, espero que unos y otros intercedan para que de una vez se consiga la reconciliación en este país.
Anna Batista Majem
annabatista07@yahoo.es