Sr. Director:
Una de las preguntas: ¿Qué les pasa a los padres que hay que enseñarles a educar?, contestaba el señor Marina: ha cambiado tanto la familia y la sociedad se ha vuelto muy individualista. Hace unos años el barrio entero educaba a los niños. Ahora salen del colegio, van a casa y se encuentran que sus padres no han llegado.
Efectivamente en la actualidad, hay muchos padres que no ponen límites a sus hijos y les permiten y consienten lo que desean, pidan o exijan, con tal de contrarrestar el tiempo que deberían estar con ellos.
Hace unos días fui a casa de una amiga que tiene dos niños pequeños y al entrar, me salió esta frase: ¿pero si esta casa parece la tienda de los juguetes?, les aseguro que había tanto juguete, que ni los niños saben que tienen.
Por otra parte nos encontramos con profesionales que incumplen por sistema con su trabajo, otros consienten ruidos y desmadre público a ciertas horas, no digamos si enchufan la tele, entre los programas basura y el ejemplo que dan nuestros políticos que se tiran a degüello para defender sus posiciones, descalificando, insultando e incluso amenazando.
¿Qué podemos esperar de los jóvenes que se educan en este ambiente?
Aunque sea una frase muy sabida: la familia es la célula de la sociedad. Y es el principal ambiente donde se decide cómo va a ser cada nuevo miembro de esa sociedad.
Con toda razón termina el señor Marina su entrevista diciendo: que suspendería a la sociedad en valores y actitudes. Estoy totalmente de acuerdo con él.
María Muñoz
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