Lo bueno de Internet es que cualquiera puede expresar su opinión desde un ordenador o desde un móvil. Lo malo es que al poder eso no le gusta. Es el caso de Jean Fernando Anleu, un guatemalteco a quien se le ocurrió opinar a través Twitter, la red social pensada para acceder desde el móvil. Anleu aseguró que debido a las acusaciones proferidas en contra del Banco de Desarrollo Rural (BANRURAL) era preferible sacar el dinero de ese banco. Las acusaciones a las que se refería Anleu son las del abogado Rodrigo Rosenberg, que en un vídeo aparecido después de su muerte acusó a Banrural de blanquear dinero.
Jean Fernando Anleu fue convocado por el juez bajo la acusación de crear pánico financiero y, al no poder pagar la fianza impuesta, pasó la noche en prisión. La noticia ha levantado a la comunidad internauta de Guatemala, indignada por el celo desproporcionado contra un ciudadano que expresó su opinión.
