El vicepresidente económico del Gobierno, Pedro Solbes, ha resucitado viejas técnicas del Felipismo, entre ellas la de lanzar globos sonda sobre malas nuevas, para ver hasta dónde llega la oposición popular a la medida. Así, durante la mañana del lunes 15 se lanzó la especie de que el Gobierno quiere endurecer el tratamiento fiscal de los planes individuales, privados, de jubilación, justo cuando bancos y cajas se han lanzado a una campaña para captar este tipo de ahorros.

 

Hasta ahora, la idea estaba clara: con tal de conseguir que cada español se hiciera con su propia jubilación privada, el Gobierno había concedido las mayores desgravaciones (afecta al total invertido) sin poner pega alguna al respecto. A cambio, la liquidez de ese dinero era prácticamente nula. Pues bien, ahora que la bolsa ha crecido, Solbes cree llegado el momento de recaudar más, si pudiera ser con efecto retroactivo, mejor.

 

Recordemos que los españoles, a 31 de diciembre de 2003, tenían ahorrado para su jubilación 56.697 millones de euros.