Acerca de su polémica con el alcalde de Madrid sobre los árboles del Paseo del Prado, la presidenta de a comunidad de Madrid ha dicho que las arboledas cuando se trata de arboledas centenarias y lugares emblemáticos, como el entorno del Museo del Prado, tienen que ser respetadas y el proyecto de remodelación, que es encomiable, tiene que respetar esas arboledas desde mi punto de vista. El entorno del Museo del Prado es un problema nacional y europeo. Ya el deseo de Carlos III era que la arboleda diese ese frescor a esta tierra tan seca. El alcalde dice que no me preocupe porque en esta legislatura no se va a hacer. Es imprescindible que los árboles se respeten porque son fundamentales en esta ciudad.