Grupos de piqueteros anarquistas intentan crear una ambiente pre-revolucionario en la Argentina. Son como 40 o 50 grupos a cuál más violento. Algunos son hijos de desaparecidos, otros comunistas-leninistas, hay muchos anarquistas y otros ni se sabe  lo que son.

 

Kirchner dice que él no va a reprimir a los manifestantes con policías de gatillo fácil.

  
Se llaman a sí mismos el grupo de Quebracho (una madera dura del norte de la Argentina), y este fin de semana han humillado a los militares penetrando en el patio de armas del edifico Libertador, sede del Ejército de tierra argentino. Los militares miraban y les dejaban hacer. Oficialmente, Quebracho protestaba por el envío de soldados argentinos a Haití.

 

¿Por qué no actuaban los militares? Pues porque a los piqueteros les ha salido un protector en la figura del propio presidente del Gobierno, Néstor Kirchner. El inquilino de la casa rosada afirmó recientemente lo que nunca debe decir un gobernante: que no está dispuesto a reprimir a los manifestantes con policías de gatillo fácil. Resultado: Los piqueteros se envalentonan y se crea un ambiente pre-revolucionario.