Al hilo de sus muchos artículos sobre las subvenciones a las energías alternativas -el de ayer lunes sobre los Entrecanales, sin ir más lejos-, y las apuestas tanto de PP (que fue quien inició el "negocio") como de PSOE, no viene mal ver qué están haciendo en otros países.
En España subvencionamos las instalaciones de placas solares, termosolar, molinillos eólicos, etc. Eso se traduce en que Alemania investiga, China fabrica, y nosotros compramos el resultado final y pagamos las subvenciones. Generamos empleo de baja cualificación (instaladores, electricistas y gente haciendo trámites burocráticos) a precio de oro.
En Estados Unidos en cambio subvencionan la investigación: empleo de altísima calidad y cualificación, que genera beneficios durante décadas en forma de patentes, regalías y participaciones en empresas fabricantes y explotadoras de la tecnología. Sin ir más lejos, recientemente se anunció un plan de subvenciones a I D i en energía solar con el objetivo de reducir el precio de 21 cént/kWh a 6 cént/kWh.
Por supuesto, lo de subvencionar las instalaciones va más con el carácter español: pelotazo fácil para los amigos.
Juan de Dios Expósito