La ruptura de la tregua por parte de ETA obligó a cambiar los planes de Moncloa sobre el Tripartito navarro

 

A pesar de la dureza con la que se expresa el secretario general del PSOE, Pepiño Blanco, así como el portavoz del PSOE, Diego López Garrido, en Moncloa, origen del conflicto, defienden al líder socialista navarro, Fernando Puras, quien ha presentado la dimisión tras obligarle el partido a romper el pre-pacto con los nacionalistas de Nafarroa Bai.

Fue de Moncloa de donde partió la orden a Puras de que forjara el Tripartito navarro: socialistas, comunistas y nacionalistas. Puras no lo veía claro, porque creía que le podía hacer perder votos. Al final, se lanzó al pacto y se convenció de su opción, pero la ruptura de la tregua por ETA obligó a Moncloa a cambiar su tesis 180 grados: ahora no era posible un pacto con los nacionalistas que fuera seguido de un atentado de ETA: ahora tocaba ser duro con la banda terrorista.

Total: que Puras ha hecho lo mejor que podía hacer: dimitir.