La Sra. Imma Mayol -concejal por ICV del Ayuntamiento de Barcelona y que vive en pareja con el Sr. Saura, Vicepresidente segundo y conseller de Interior de la Generalitat de Catalunya-, justificó, en el pleno del Ayuntamiento, el elevado coste de la construcción de una segunda perrera para la ciudad de Barcelona, comparándola con la inversión que representa la construcción de una escuela de calidad o una biblioteca pública.

Sr. Director:

"Construir una escuela cuesta 1.500 euros el metro cuadrado y la perrera 1.200 euros" afirmó sin ningún rubor.

Los medios de la ciudad y los políticos de la oposición lo han considerado "un argumento desafortunado", pero conociendo la forma de vida de la concejala, la ideología y el partido en el que milita, nos parece que no se trata sólo de un desafortunado argumento sino de una traición del subconsciente. Como la Sra. Mayol, muchos otros políticos se están mostrando más interesados por el bienestar animal que por el de los humanos o, propugnan el aborto libre al tiempo que se oponen a la muerte de un animal doméstico. ¿Será Mayol una de las personas que prefieren un perro a un hijo?

José Morales Martín

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