Sebastián está encantado con su plan Vive. Y además, está muy molesto de que le hubiera rebautizado como plan Muere o plan Zombie. Así que en la sesión de control de este miércoles, ofrece algunos datos. A fecha de este miércoles se han cerrado ya 41.984 operaciones de las 70.000 previstas para el 2009, suponen ya el 20% de las matriculaciones y ayudan al 80% de los compradores que adquieren a crédito. Su apuesta es clara: es mejor una ayuda a la financiación que una pequeña ayuda directa.
El problema, le espeta el popular Celso Delgado, es que las matriculaciones han caído un 42,94% en el primer trimestre (71,4% en industriales), mientras que las ayudas directas en Francia o Alemania han permitido repuntar las ventas en un 39 y 8% respectivamente. Las medidas directas a la venta son más eficaces, concluye. Y reitera la posición popular: bonificación temporal en el impuesto de matriculaciones por dos años y subvención de 1.000 euros para el vehículo nuevo y de 500 para el usado. Pero Sebastián no se baja de su burra. Y además, le lanza un reto: Si sus medidas son tan buenas, ¿por qué no las ponen en marcha ahí donde gobiernan como ya ha hecho Navarra?. Ahí queda el reto.