A través de la agencia de noticias Zenit nos llega esta información. Y es que ni un museo, ni una parada para turistas, ni un centro cultural, ni una ONG: El Vaticano es un lugar de oración.

Lo ha dicho Benedicto XVI a los responsables de la Basílica Vaticana y algunos piensan que otros templos, en todo el mundo, podían darse por aludidos. En especial, las catedrales.