- Al tiempo, se hacen con la joya de la corona, la división hispanoamericana de la antigua eléctrica española.
- Naturalmente, la cotización ha subido… con lo que ENEL ganará más dinero cuando privaticen parte de su 92% del capital.
- En definitiva, Endesa se jibariza y ENEL puede aliviar su elevada deuda.
- Al Gobierno Rajoy no le gusta la operación pero asegura estar atado de pies y manos.
- En el entretanto, se sigue manteniendo la ficción de la 'Endesa española', cuando sólo se pretende mantener la cuota de mercado: Borja Prado continúa cobrando como presidente de Endesa.
- Todo empezó con Zapatero, que vendió Endesa a los italianos para beneficiar a José Manuel Entrecanales.
- Y encima, el vicepresidente económico de ZP, Pedro Solbes (en la imagen), que dio el visto bueno a la operación, se ha lucrado como consejero de ENEL durante tres años largos (de abril de 2011 a mayo de 2014).
Con nocturnidad y cierta alevosía, los italianos de la estatal ENEL, liderada por Francesco Starace, comunicaban a la CNMV que compraban la división iberoamericana de Endesa, la joya de la corona y la que tiene más posibilidades de crecimiento, y que, a cambio, los accionistas de Endesa recibirían un megadividendo por la operación. El diario Expansión, propiedad de los italianos de Rizzoli y donde figura como consejero el presidente de Endesa, Borja Prado, lo interpretaba como todo un regalo a los accionistas de la española Endesa. Para entendernos, un gran favor a España.
Sucede que el 92% del capital de Endesa es propiedad de ENEL, por tanto, los italianos se están haciendo un favor a sí mismos a costa de vaciar y desmantelar la española Endesa. Se quedan con la división con mayor proyección de futuro y lo equilibran con un dividendo que les ayudará a reducir su excesivo apalancamiento.
No sólo eso. Como consecuencia de este generoso dividendo, naturalmente, subió la cotización en bolsa, lo que presagia que cuando ENEL venda parte de su participación en Endesa (se ha hablado de un 30%) podrá obtener más dinero de los incautos que acudan a la OPV. Es lo que se dice crear valor para el accionista… mayoritario.
Es todo un plan programado para desmantelar Endesa, de la que sólo les interesa mantener la cuota de mercado en España. Un vaciamiento financiero que, además, corre en paralelo con una mejor producción de electricidad en las plantas de la antigua primera eléctrica española y con una reducción continua de plantilla y el cierre de divisiones que se llevan ya directamente desde Roma.
Al Gobierno español no le gustó el plan Starace, emitido el 31 de julio, pero ha tenido que tragar. Lo que en Industria llevan peor es que encima, con la aquiescencia de medios informativos españoles, se venda este vaciamiento de la empresa como el reforzamiento de Endesa y como poco menos que un favor a España.
La verdad es que el anterior Ceo de ENEL, Fulvio Conti tenía previsto cesar al español Borja Prado Eulate como presidente de Endesa. Starace cambió de opinión al considerar que convenía seguir pagándole el sueldo. Mientras un español esté al frente de Endesa se puede desmantelar la compañía y seguir diciendo que ENEL defiende, incluso potencia, la eléctrica española… que tiene bemoles la copla.
En el Ministerio de Industria y Energía, que lidera Soria, braman pero aseguran que no pueden hacer otra cosa. Fue el Gobierno Zapatero quien vendió Endesa a ENEL para beneficiar a José Manuel Entrecanales. Para mayor descaro, el vicepresidente económico de Zapatero, Pedro Solbes, se convirtió tras su cese en consejero de ENEL y ha estado cobrando su estipendio durante casi tres años, hasta su cese en mayo de 2014.
Política industrial y marca España, que le dicen.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com