Los socialista de Pascual Maragall, los independentistas de Carod-Rovira y los comunistas de Joan Saura han firmado un acuerdo modélico, que ha dado lugar al Tripartito. Zapatero babea de envidia ante la posibilidad de realizar algo similar en Madrid. Sin embargo, el acuerdo no está cerrado, y no ha sido ninguna cuestión política, ni económica, ni idiomática, ni cultural la que enfrentan, en estos momentos, a los tres líderes catalanes. Lo único que les enfrentan son "las cosas de la prensa". En concreto tres puntos: no hay acuerdo sobre quién debe dirigir la televisión pública (CCRTV), quién debe ser el portavoz del Gobierno y quién debe gestionar la publicidad institucional de la Generalitat. A lo mejor, es que estas cuestiones de la prensa son más importantes de lo que parece.