¿Por qué no el de los ejecutivos de otras empresas?

El portavoz Grupo Parlamentario Socialista, José Antonio Alonso, presentó este martes una iniciativa parlamentaria que insta al Gobierno a controlar los sueldos de los ejecutivos de banca. Alonso considera que los salarios deben ir ligados a la evolución a medio plazo de las entidades, respondiendo también a los accionistas para tutelar así sus intereses, especialmente en el caso de los minoritarios.

El PSOE hace así un nuevo brindis al sol, ya que pone en el centro de la polémica a los bancos: ¿por qué no al resto de las empresas? Está comprobado que el margen de maniobra es amplio: dietas, blindajes, pensiones y otras remuneraciones hacen que en ocasiones los sueldos no sean más que una pequeña parte de los ingresos.

Los bancos suelen huir de la pregunta, pero los hechos indican que, mientras el Sabadell tomó medidas al respecto, FG despreció la posibilidad de renunciar a sus bonus calificándola poco menos que de un recurso para los fracasados. Finalmente, el presidente del BBVA optó simplemente por congelarse el sueldo. Por otra parte, siempre hay formas y formas de ver los resultados: ¿A qué se ligarían los sueldos: a los beneficios netos, brutos, margen de explotación, morosidad?