Sr. Director:

He oído las noticias y, como siempre, hay alguna que me pone los pelos de punta. Dice la noticia que se está investigando cómo hacer un ser humano artificial. ¿Y el SIDA, el cáncer...? Ya sé que se están investigando pero... ¿Por qué se emplea dinero en investigar la construcción de un ser humano artificial, cuando hace falta encontrar las soluciones de tantas enfermedades?

Por mucho que pienso, sólo se me ocurre que el motivo es el negocio que comportaría. ¿A qué negociante adinerado, pero sin "usar" su conciencia humana, le importan las personas que sufren y mueren por causa de las enfermedades? Ya lo decía el viejo Aristóteles: En cada relación humana, si no se busca honestamente lo mejor para la otra persona, suele quedarse en una relación utilitaria. Dicho de otra forma, las personas sólo se contemplan como un objeto para producir dinero.

Y digo yo, ¿dónde está el respeto a la dignidad de cada persona? Me pregunto si el actual liberalismo económico es consciente de que la libertad de mayor calidad se alcanza cuando al vivir las relaciones humanas tiene en cuenta en primer lugar el respeto y la dignidad de cada persona. Incluso en Escuelas para Empresas de la Cultura Occidental se está descubriendo que la eficacia económica tiene en segundo lugar las ganancias y, el primero, las personas trabajadoras. ¡A ver si se enteran de una vez por todas!

Isabel Gil

cerverasebasti@yahoo.es