• Urge una rebaja de las cotizaciones sociales en un país donde cada vez hace falta ser más temerario para montar una empresa.
  • Los autónomos siguen financiando por adelantado al Estado pagando un IVA que aún no han cobrado.
  • No estaría de más una bajada de las cuotas de autónomos, ahora que han visto disminuidas sus ganancias y han rebajado el precio de sus servicios.
  • Lo peor del discurso del Príncipe, que lo ha pronunciado en inglés.
  • Se trata de un servilismo innecesario al mundo anglosajón, tratándose del hijo del monarca de España, el país de origen de la segunda lengua más hablada en todo el mundo.
El Príncipe Felipe (en la imagen) ha realizado una sentida defensa de la importancia de la pequeña y mediana empresa en nuestro país, con motivo de la inauguración del Spain Investors Day.  Se trata de la tercera edición del foro internacional en el que grandes empresas y el Gobierno se reúnen con inversores internacionales para vender la marca España en el extranjero. Además, los inversores pueden conocer de primera mano los planes del Gobierno para la economía española.

Entre las personalidades que representan al Ejecutivo en este foro se encuentra el secretario General de Industria y Pymes, Luis Valero, así como los secretarios de Estado de Comercio y Hacienda, Jaime García-Legaz y Miguel Ferre.

Mucho tienen que hablar entre ellos y con la responsable del Ministerio de Empleo para mejorar las condiciones de los emprendedores en nuestro país.

A pesar de los discursos paternalistas del Gobierno, los autónomos tienen que seguir adelantando el dinero que aún no han percibido del IVA en un momento en el que a veces no pueden pagar ni sus alquileres.

Hace falta ser muy valiente para abrir una empresa con el aumento de los impuestos, como el IBI, o el elevado coste de las cotizaciones, la profusión de inspecciones en las pequeñas empresas, desproporcionadas respecto a las realizadas a las grandes. ¿Y por qué no una bajada en la cuota de autónomos, que han tenido que bajar los precios que prestan por sus servicios En definitiva, hasta el momento el Gobierno no ha adoptado medidas serias para ayudar a los autónomos en lo que realmente necesitan.

La intervención del Príncipe ha sido muy oportuna, no así la lengua utilizada para expresar sus ideas: el inglés. Ya sabemos que el Príncipe es políglota, pero el hijo del Rey de una de las monarquías más antiguas de Europa, donde se habla el  castellano, segundo idioma tras el chino en número de hablantes nativos, no debe utilizar en su  su propio territorio la lengua de Shakespeare. Semejante gesto no deja de ser una autohumillación innecesaria y un servilismo fuera de lugar protagonizado por el heredero de la Corona, que nos representa ante la comunidad internacional. Si criticaron en todos los países de habla hispana a Miss Venezuela por hablar en inglés en el concurso celebrado en Las Vegas, qué no se debería de hacer con los responsables de este gesto vergonzante ante nuestro propio idioma. 

Los nacionalistas catalanes tienen motivos de sobra para el pitorreo a cuenta de esta absurda situación. Se reivindica el castellano en las aulas y luego se habla en inglés ante un auditorio extranjero. ¿Cómo nos van a tomar en serio fuera ¡Cuánto deberíamos aprender de los franceses! Ellos sí saben defender su idioma. A nuestros dirigentes parece habérseles olvidado. Porque el Príncipe, en estos asuntos, sólo cumple órdenes.

Sara Olivo
sara@hispanidad.com