Tras la denuncia presentada contra él por Calamita ante el CGPJ
El nuevo CGPJ se ha estrenado con una denuncia presentada por el juez de Familia de Murcia, Ferrín Calamita contra el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Murcia, Juan Martínez Moya. La razón es que Martínez Moya debía habarse inhibido por haber iniciado un expediente disciplinario paralelo. Es sólo una de las muchas irregularidades del proceso denunciadas por la defensa de Calamita.
Pues bien, tras la denuncia presentada ante el CGPJ y la aparición en los medios del juez Calamita, Martínez Moya ha decidido apartarse del proceso que se sigue contra el juez de Familia de Murcia. Su abogado, Javier Pérez-Roldán, se congratula de la decisión, aunque insiste que se hace con meses de retraso. Tenía que haberse inhibido en enero, cuando admitió a trámite la querella. Pérez-Roldán denuncia además que desde que se denunció su incompatibilidad, la Sala buscó procedimientos para dilatar su resolución.
El letrado entiende que la inhibición de Martínez Moya da la razón a Ferrín Calamita pues se reconoce así que hasta el presente momento mi cliente no ha tenido un juicio imparcial. Entendemos que ahora la Sala debe admitir la inhibición y acordar la nulidad de todas las actuaciones, algo por lo que llevamos luchando desde hace tiempo. El propio juez Calamita considera que se ha seguido contra él un juicio político.
Así que Pérez-Roldán espera que se archive la querella contra Calamita por considerarla infundada. Si no se hiciera así, esta parte incidirá en otras líneas de defensa, pues entendemos que en el presente procedimiento se han producido otras irregularidades que de seguirse adelante con el acoso a mi representado deberán ser puestas de manifiesto para poder demostrar su inocencia.