En la SER, Carlos Francino ha entrevistado al ministro de Defensa, José Antonio Alonso. Alonso se ha mostrado impresionado de su viaje a Afganistán: Es un país destruido y necesita la ayuda internacional para reconstruir lo más básico para la vida y la subsistencia. Estamos haciendo un trabajo muy bueno, estamos garantizando la seguridad de los ingenieros y trabajadores que están haciendo una carretera un puente. Obras de construcción de un hospital, de conducción de agua, una de tendido eléctrico, una biblioteca. Por tanto, la respuesta es que el país está muy mal de verdad.
Y ha explicado la razón de esa impresión que le ha causado el país afgano: He venido impresionado de ese viaje, porque los que vivimos en sociedades ricas nos conmueve que tantas cosas que damos por descontadas en las sociedades que vivimos, en esos sitios no existen. El estado de ánimo de los soldados es bueno, he encontrado a gente muy profesional, con los valores muy claros y con un espíritu de servicio y ayuda impresionante. Y además lo reconocen los propios afganos. Todos elogiaron la actitud de los militares. La sanidad militar está haciendo labores de asistencia a los civiles que lo necesitan.
Alonso ha señalado que va concretar en el parlamento español el número de soldados, y ha agradecido a los líderes políticos su apoyo en este asunto, aunque los detalles los daré en el parlamento donde haré una justificación objetiva y razonable de por qué necesitan más soldados.
Sobre el último incidente de las tropas españolas en Afganistán, Alonso ha explicado que fue un tiroteo al que los soldados españoles respondieron con absoluta profesionalidad evitando más riesgo que el del propio ataque. La seguridad está garantizada. De lo que se trata es de garantizar la seguridad de la gente que está haciendo las obras de reconstrucción civil.