- Lo ha dicho el secretario de Estado de Energía, Fernando Martí, y es la primera vez que un alto cargo del Gobierno Rajoy lo admite.
- Y centra la cuestión sobre las renovables: el problema está en la energía solar, no en la eólica.
- Además, Martí advierte a Endesa sobre los costes extrapeninsulares.
- La sensación general es que la reforma energética no ha concluido: se alargará hasta dos años.
El secretario de Estado de Energía, Fernando Martí (en la imagen), es una pieza clave de la Administración Rajoy por la sencilla razón de que uno de los grandes problemas que aborda el Ejecutivo es la insostenible situación del sector energético y, en particular, las insostenibles primas a las energías renovables.
Pero un alto cargo no puede evitar su comparecencia parlamentaria. Y ahí es donde estuvo en la mañana del martes. Y allí fue donde Martí se soltó la melena. Era un secreto a voces pero por primera vez un alto cargo del Gobierno Rajoy reconoce que la reforma energética, esa que se está haciendo por retales, ha conllevado, y conlleva, pues aún no ha concluido, presiones "tremendas" sobre el Ejecutivo.
Como ya debe estar muy harto de dichas presiones, citó por sus nombres a varios de los presionantes, entre ellos, la patronal eléctrica UNESA y las patronales de las energías renovables.
Y para dar más pistas, y ya centrado en las subvenciones a las renovables, señaló que la eólica va por la "senda correcta", al tiempo que calificó como "exceso" la situación -es decir las subvenciones- a la energía solar.
Eso sí, diplomacia obliga, Martí no citó las presiones del embajador norteamericano en España, Alan Solomont, quien representa a los fondos norteamericanos que han prestado dinero para proyectos renovables y que no están dispuestos a que se cierre el grifo de subvenciones públicas españolas que posibilite el retorno de sus inversiones. Y la defensa de esos intereses por parte de Solomont ha excedido con mucho la gestión diplomática para entrar en el terreno de la amenaza. Y, por el momento, Solomont ha ganado.
Por cierto, Martí ha dado a entender en su comparecencia que la reforma energética no ha concluido, y ha cifrado en dos años -o sea, que quedaría más de un año- el proceso de nuevo mix energético y de lucha contra el déficit de tarifa. Por tanto, la reducción de las subvenciones a las renovables sigue en pie.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com