El sector bancario aún no sale de su asombro ante la sentencia por la que un Juzgado de Valladolid condena al Fondo de Garantía de Depósitos (organismo financiado por el Banco de España y la banca privada y encargado de afrontar las crisis bancarias) a pagar 1.122 millones de euros a Domingo López Alonso, antiguo propietario y presidente del Banco de Valladolid, hoy Barclays Bank España. El Banco de Valladolid fue intervenido en 1978. En el momento de la intervención, casi tres cuartas partes del volumen crediticio de la entidad se destinaban a empresas del propio Domingo López.

Pues bien, tras un largo periplo judicial, el juez de origen guineano Joaquín Ebile Nsefum ha condenado al FGD al pago de 1.122 millones de euros. Dicho de otra forma, no es que el FGD entre en quiebra, si se ve finalmente obligado a pagar esa cantidad, sino que el organismo encargado de afrontar las crisis bancarias debería pensar en la suspensión de pagos. Ahora, el FGD va a presentar un escrito de oposición al mismo juez, antes del 31 de enero. A partir de ahí, la única posibilidad que le queda es acudir al Tribunal Constitucional.

Lo más gracioso de todo es la forma en que el juez Ebile Nsefum ha llegado a la espeluznante cifra de 1.122 millones de euros. Hasta ahora, Domingo Alonso sólo había conseguido que los tribunales le reconocieran una indemnización de 26,5 millones de euros. Pues bien, el magistrado Ebile ha aplicado un 15% de interés variable desde el comienzo del pleito, en 1978. Y claro, le ha salido una bonita cantidad.