La Audiencia de Barcelona ha rehabilitado a Carlos Morín (en la imagen), para quien la Fiscalía solicitaba 273 años de reclusión por ejecutar 89 abortos ilegales a adolescentes en avanzado estado de gravidez.
También han sido indultados todos sus cómplices, comprendida su esposa y socia, para quien la fiscal exigía 171 años de presidio. La asociación E-Cristians, personada en el juicio de Morín como querella popular, ha manifestado su "indignación" por la liberación del proscrito abortista Carlos Morín y la de sus 10 cómplices y ha declarado que apelará el veredicto en el Tribunal Supremo, y también en el Tribunal Europeo de Justicia, si fuera necesario.
Sin estar al corriente todavía de todos los detalles del fallo, la asociación E-Cristians reconoce que "es muy difícil encajar que haya una absolución total de todos los inculpados, dadas las pruebas presentadas durante el juicio" y que se hayan excluido "la totalidad de las cuestiones previas planteadas, sin que haya lugar a declarar la nulidad de actuaciones pretendidas en las mismas".
Josep Miró i Ardèvol, presidente de E-Cristians, reconoce que "el tribunal ha dictado una sentencia ideológica, en la que se manifiestan las preferencias y las interpretaciones sociales de los jueces, pero no los hechos y sus interrelaciones, que constituyen la base de toda práctica judicial". "Resulta increíble que después de las pruebas presentadas por la Fiscalía y de los hechos conocidos no se deduzca de ellos ningún tipo de responsabilidad penal".
Por otra parte, el Centro Jurídico Tomás Moro está estupefacto por la sentencia en la que se absuelve al gran líder de los abortos, Carlos Morín. Efectivamente, la sentencia exime de gravamen penal a los inculpados, aun a pesar de advertir que la mayoría de las adolescentes que abortaron bajo el hipotético de peligro para la salud física o psíquica de la embarazada no fueron examinadas, personalmente, por ningún psiquiatra.
El texto de la sentencia afirma que "las testigos o no recuerdan, o directamente niegan haber mantenido una entrevista personal con un psiquiatra". Todas ellas identifican, sin embargo, su rúbrica al pie del llamado "test de Goldberg", si bien, algunas adolescentes, rechazan haberlo rellenado personalmente.
La Audiencia admite informes psiquiátricos producidos sin ver antes a la embarazada. Esta emisión de informes sin revisión previa por el médico, es una clara extravagancia médica puesta de manifiesto en la Audiencia por parte del Colegio de Médicos de Barcelona, y que atenta a los principales criterios de la lógica. Si el legislador demanda el informe médico de un psiquiatra es porque trata de salvaguardar a la criatura de posibles manipulaciones de la legislación, y lo resguarda, también, de la simple voluntad abortista de la madre.
"El niño por nacer es un ser humano a partir de la concepción, y su vida debe ser respetada. Esa vida fue redimida por Cristo, esa vida es un regalo de Dios", afirma el teólogo suizo, Karl Barth.