Doña Letizia Ortiz Rocasolano y don Felipe de Borbón y Grecia visitarán el santuario de la Virgen de Covadonga, allí donde empezó la Reconquista (palabra fea, según la terminología políticamente correcta. Digamos que comenzó el contraataque de los salvajes godos frente a la culta y sofisticada España musulmana). Y también nos hemos enterado de que la novia, el 22 de mayo, dejará su ramo a los pies de la Virgen de Atocha.
Demasiadas emociones para este viejo corazón. Ahora, ya sólo nos falta saber si la novia, que va a hacer un voto ante Dios, un compromiso que engloba la fidelidad, indisolubilidad y maternidad, cree en ese Dios. Hasta ahora nos han dicho que no. Y seguimos a la espera.
Claro, que bien pudiera ser que Covadonga haya dejado de ser un santuario mariano y se haya convertido en un símbolo político (histórico a fuer de preconstitucional). En cuyo caso, naturalmente, guardaré un respetuoso silencio.
Eulogio López