Como colofón del Consejo de Ministros, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de
Pero hay más: "Marruecos y España no representan dos civilizaciones distintas. No existe la civilización árabe frente a la occidental. Existe una sola civilización: la que planta cara a la barbarie terrorista, independientemente de sus ideas sociales o religiosas". Ahora bien, lo cierto es que algo debe tener el Islam y la civilización árabe para que resulte tan difícil que en ella cuaje la democracia. Y, por otra parte, desde 1945, no se conoce ninguna guerra entre dos democracias. Y lo que está claro es que Marruecos todavía es un proyecto de democracia, no una democracia consolidada.