Se trata de relanzar la sociedad de la información y para eso es necesario invertir en red. Los dos conceptos clave de la nueva Internet: transparencia y atomización. Ningún peligro más grave que el del control de la red por los Señores de la Prensa. La WWW se ha convertido, además, en el soporte tanto del lenguaje escrito como del oral, de la nueva prensa y el periodismo ciudadano y de la TV El sábado 17 era el Día de Internet. En coincidencia con ello, el ministro de Industria, Miguel Sebastián ha prometido a Telefónica que las cosas van a cambiar En otras palabras, que no se le pondrán trabas a la antigua operadora de referencia a la hora de lana ofertas barata para conectarse a la red. Por el momento, la política de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones del Mercado de las telecomunicaciones (CMT) es la opuesta. No se prima la inversión en red de otros operadores, quienes, por lo tanto, prefieren utilizar la de Telefónica. Como a la empresa no le sale rentable ceder su red a los precisos que le marca la CMT, sencillamente decide no invertir más en red. Total: en España no se desarrolla en tiempo y forma la inversión en IPTV, ni en VDSL ni en fibra óptica, sólo en telefonía móvil, donde merece la pena invertir en el parque antenas por los elevados márgenes del negocio. Pues bien, Miguel Sebastián ha prometido al presidente de Telefónica, César Alierta que la política del Gobierno va a cambiar y que, en la medida en que depende del Ministerio, la regulación dejará de apoyar a France Telecom-Orange y otros grandes operadores europeos, antiguos monopolios, que se niegan a invertir en España prefieren presionar a la CMT para conseguir precios baratos usar la red de Telefónica. Y lo mismo puede decirse de Vodafone con Tele 2. Y una de dos: o se abarata la banda ancha o la sociedad de la información no creerá en España. Algo que el ministro Sebastián sabe mucho más importante que la política de cuotas empresariales. Por otra parte, el nuevo Día Mundial de Internet hace hincapié sobre dos conceptos clave; la utilización de la red para agredir y el control de contenidos en la red. Todo el mundo está de acuerdo en que lo peor de Internet es el anonimato, en sus diversas formas.
El segundo problema es el control de la red. El último cuarto del siglo XX se caracterizó por la creación del oligopolio informativo en la sociedad de la información, una cadena de fusiones empresariales que llevó a la formación de poderosos multimedia: los señores de la Prensa, de una u otra ideología, controlaban la información, por los elevadísimos gastos de la prensa escrita y por el sistema concesional obligado ser amigo del poder político para obtener licencias-, y controlaban, y en buena parte aún controlan- todo el flujo informativo y la influencia intelectual. En el siglo XXI, Internet rompió todo eso y nació, no ya el periodismo ciudadano pequeñas empresas, por ejemplo los famosos newsletter o confidenciales, capaces de publicar lo que se no se atreven a decir los grandes multimedia, e incluso el periodismo ciudadano, sin duda el fruto más granado de la sociedad de masas. En cualquier caso, con esta nueva edición del Día de Internet, cunde la idea de que aún más peligroso que el descontrol de la Red es el control de la Red. Por otra parte, la WWW no se conforma con encasillarse en el periodismo escrito, en la sociedad que lee, sino que quiere llegar a la más masiva sociedad que ve. En otras palabras, a la IPTV, que supondrá la conquista, no ya en la prensa, sino también de la TV. Al final, la pantalla se convertirá en periódico y canal de televisión, en soporte del lenguaje escrito y del lenguaje oral, así como de la imagen.
El segundo problema es el control de la red. El último cuarto del siglo XX se caracterizó por la creación del oligopolio informativo en la sociedad de la información, una cadena de fusiones empresariales que llevó a la formación de poderosos multimedia: los señores de la Prensa, de una u otra ideología, controlaban la información, por los elevadísimos gastos de la prensa escrita y por el sistema concesional obligado ser amigo del poder político para obtener licencias-, y controlaban, y en buena parte aún controlan- todo el flujo informativo y la influencia intelectual. En el siglo XXI, Internet rompió todo eso y nació, no ya el periodismo ciudadano pequeñas empresas, por ejemplo los famosos newsletter o confidenciales, capaces de publicar lo que se no se atreven a decir los grandes multimedia, e incluso el periodismo ciudadano, sin duda el fruto más granado de la sociedad de masas. En cualquier caso, con esta nueva edición del Día de Internet, cunde la idea de que aún más peligroso que el descontrol de la Red es el control de la Red. Por otra parte, la WWW no se conforma con encasillarse en el periodismo escrito, en la sociedad que lee, sino que quiere llegar a la más masiva sociedad que ve. En otras palabras, a la IPTV, que supondrá la conquista, no ya en la prensa, sino también de la TV. Al final, la pantalla se convertirá en periódico y canal de televisión, en soporte del lenguaje escrito y del lenguaje oral, así como de la imagen.