Se jubila una institución del empresariado catalán, Ricardo Fornesa, que abandonó la Presidencia de Criteria -el grupo industrial de La Caixa- en la Junta General de Accionistas 2008 celebrada el jueves en Barcelona. Le sustituye en la Presidencia el presidente de La Caixa, Isidro Fainé, y el director general de la misma entidad, Juan María Nin, pasa a ser vicepresidente de Criteria y se crea una Comisión Ejecutiva, donde se integra el ex vicepresidente Rodrigo Rato. Esto significa que Rato cobrará más, algo muy necesario dado que su trabajo a comisión en Lazard no le rinde lo esperado pero, aún más relevante, precisamente ahora cuando Esperanza Aguirre está a punto de llegar a un acuerdo con Moncloa y revitalizar el ataque a Miguel Blesa y la conquista de Caja Madrid. Dicho de otro modo, la opción de Rato como sustituto de Blesa en la Presidencia de Caja Madrid pierde fuelle.
Con todo, lo más importante no son los cambios en el Consejo sino en el equipo directivo. Y es que Francisco Reynés, director general de Criteria y hombre de confianza de Fornesa como de Fainé, está llamado a ser consejero delegado de Abertis (Alemany será presidente y Fainé abandonará el cargo). En otras palabras, La Caixa tiene pendiente el nombramiento de un nuevo ceo en sustitución de Reynés que no saldrá de la actual estructura de La Caixa, sino que será un fichaje externo.
Por lo demás, Criteria nació con la crisis económica, y eso se nota en sus resultados. Sobre todo, es un grupo de participaciones (Repsol, Gas Natural, Abertis, etc.) que depende de la evolución de la Bolsa. En otras palabras, muchos clientes de La Caixa invirtieron en Criteria y ahora necesitan rentabilizar una inversión que no ha cumplido las expectativas... porque era casi imposible que las cumpliera. Por tanto, La Caixa busca premiar a ese accionista como sea, en forma de títulos o con dividendos, porque la fortaleza de Criteria son, precisamente, sus participaciones industriales y su envés consiste en que el mercado prefiere comprar repsoles antes que una tenedora de repsoles.
No sólo eso: Criteria nació con una cartera industrial del 82% y financiera del 17. Ahora, las participaciones industriales se han reducido al 72% mientras las financieras alcanzan el 28%. Ahora bien, las rentables son las participaciones históricas de La Caixa, la industria, no los bancos.
Y añadan esto: por el momento, la expansión financiera de La Caxia se ha realizado con participaciones minoritarias: 20% en Inbursa (México, Carlos Slim), BPI (30%), Boursorama (21%), Erste Group Bank, Austria (85%), The Bank of East Asia (10%), etc. Estrategia muy distinta a la de Emilio Botín.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com