Se le olvida el encuentro comprometido con el Santander Fue la propia Kristina la que recordó en la rueda de prensa celebrada este lunes por la tarde que hace cinco años y medio su marido tuvo una cumbre borrascosa con los empresarios españoles. Entonces se montó una buena en la CEOE porque los empresarios españoles desconfiaban de la capacidad del Ejecutivo K para sacar adelante la Argentina. Broncas, gritos, malas caras, chulerías. Hubo de todo. Cumbres borrascosas gusta decir a su esposa.
Kristina explica la posición de su marido (se le escapa como si fuera ella la mandataria entonces: ¿Quizás lo era?) en que era necesario crecer para repartir. Pero crecer no sólo económicamente sino en cohesión social para evitar que se repitiera la misma tragedia. Su balance cinco años después es relativamente positivo: Hemos crecido a tasas chinas.
Entonces, ¿por qué no se reúne con los empresarios? Kristina señala que va a tener cinco o seis reuniones con empresarios; lo normal. No tan normal. ¿Por qué no con todos a la vez? Y por otra parte, ni siquiera se sabía su agenda. Sabía que se reuniría con Brufau, al que cita por su nombre, junto a su socio argentino, Eskenazi. Y deja claro que YPF es una empresa argentina con accionistas españoles. También se acordaba de la reunión con Telefónica, pero curiosamente no recordaba la reunión con el Santander. Se lo tuivieron que chivar sus asistentes. Lamentable.
Por otra parte, fue la propia Kristina la que suspendió la rueda de prensa. Me van a disculpar, pero hace 23 minutos que me está esperando el Sr. Rajoy y no quiero contribuir al enfrentamiento entre el Gobierno y la oposición. Y adiós, ciao, arrivederci, hasta luego, bye, bye. Increíble. La invitada decide ella por sí sola terminar una rueda de prensa. Una falta de educación grave. Una falta de estilo y de saber estar.
Kristina explica la posición de su marido (se le escapa como si fuera ella la mandataria entonces: ¿Quizás lo era?) en que era necesario crecer para repartir. Pero crecer no sólo económicamente sino en cohesión social para evitar que se repitiera la misma tragedia. Su balance cinco años después es relativamente positivo: Hemos crecido a tasas chinas.
Entonces, ¿por qué no se reúne con los empresarios? Kristina señala que va a tener cinco o seis reuniones con empresarios; lo normal. No tan normal. ¿Por qué no con todos a la vez? Y por otra parte, ni siquiera se sabía su agenda. Sabía que se reuniría con Brufau, al que cita por su nombre, junto a su socio argentino, Eskenazi. Y deja claro que YPF es una empresa argentina con accionistas españoles. También se acordaba de la reunión con Telefónica, pero curiosamente no recordaba la reunión con el Santander. Se lo tuivieron que chivar sus asistentes. Lamentable.
Por otra parte, fue la propia Kristina la que suspendió la rueda de prensa. Me van a disculpar, pero hace 23 minutos que me está esperando el Sr. Rajoy y no quiero contribuir al enfrentamiento entre el Gobierno y la oposición. Y adiós, ciao, arrivederci, hasta luego, bye, bye. Increíble. La invitada decide ella por sí sola terminar una rueda de prensa. Una falta de educación grave. Una falta de estilo y de saber estar.